Ser estudiante es más peligroso que ser militar
Nueve tiroteos en escuelas de Estados Unidos desde comienzos del 2018 y la cifra de educandos y profesores abatidos ha superado, por mucho, las muertes en combate de las Fuerzas Armadas en ese país tan desarrollado y violento a la vez.
Esto indicó recientemente el mayor y más antiguo periódico de la capital estadounidense The Washington Post, citando números públicos. Y es que en lo que va de año se han contabilizado 13 soldados caídos en misiones. Mientras hay 27 educandos que perdieron sus vidas a causas de los frecuentes tiroteos. No obstante, el medio especificó que si tenemos en cuenta a los militares fallecidos por accidentes, la cantidad de bajas en el Ejército alcanzaría las 42 personas en el propio período.
De hecho, el último tiroteo en el colegio de Santa Fe (Texas) dejó un saldo de al menos diez fallecidos –ocho estudiantes y dos maestros–, además de otros 13 heridos. Así, esta escuela secundaria pasó a ser una verdadera carnicería, la última en lo que algunos expertos consideran una epidemia nacional de tiroteos masivos en los EE.UU.
Ahora, según el vicegobernador texano, Dan Patrick, la causa principal de esta clase de tragedias constituye el fomento de una cultura de violencia, cada vez más propagada y extendida en territorio estadounidense y también en otras naciones del llamado «Primer Mundo». «Hemos restado valor a la vida a través del aborto, la desunificación familiar, la violencia en el cine y sobre todo en los videojuegos, que hoy se comercializan más y mejor que películas y Cds de música. Los sicólogos y siquiatras afirman que los adolescentes, producto de esto y muchísimos otros factores, se han vuelto insensibles a los actos violentos», compartió Patrick en un programa de la cadena televisiva ABC News.
Además, el vicegobernador rememoró que desde los atentados del 11 de septiembre del 2001, en Estados Unidos se hizo un «buen trabajo» en proteger las instituciones gubernamentales, pero «no se ha hecho nada» por convertir los centros educativos en centros menos vulnerables. Asimismo, y según sus propias palabras, una de las soluciones a la creciente problemática de los tiroteos en las escuelas pudiese ser reducir la cifra de personas que ingrese a los edificios y armar a los profesores, un asunto bastante controversial por estos tiempos.
Por su lado, a la interrogante del conductor del espacio de TV de si debieran aplicarse restricciones a la circulación de armas de fuego entre la población civil, Dan respondió lo siguiente: «No se trata de armas, se trata de seres humanos». Y añadió que «el control de armas de cualquier tipo empieza en el hogar» y que «en Texas, por ejemplo, la ley prohíbe de los menores de edad a un arma cargada».
Pero, será esto suficiente??
