El sonar, una técnica de detección
El sonar una técnica que utiliza la propagación del sonido bajo el agua para el sondaje, la comunicación submarina y la detección de objetos sumergidos. Es un dispositivo similar a la radio y al radar, que en este ámbito resultan inoperantes, pues las radioondas no se transmiten en el agua.
El uso del sonar data a 1490, cuando Leonardo Da Vinci usó un tubo metido en el agua para detectar barcos, poniendo un oído en su extremo. En el siglo XIX se utilizaron campanas subacuáticas en los faros para avisar del peligro a los marineros. No fue hasta 1912 con el desastre del Titanic que se impulsó las investigaciones para el uso de sonido para la ecolocalización submarina. La primera patente del mundo respecto a un dispositivo de esta tipología fue concedida al meteorólogo inglés Lewis Richardson por la Oficina Británica un mes posterior al hundimiento del Titanic. Por otra parte el físico alemán Alexander Behm obtuvo otra por un resonador en 1913. El ingeniero canadiense Reginald Fessenden en 1914 construyó un sistema experimental que alcanzaba detectar un iceberg a dos millas de distancia, pero era incapaz de establecer en qué dirección se encontraba.
Durante la Primera Guerra Mundial producto a la necesidad de detectar submarinos, se llevaron a cabo varias investigaciones sobre el uso del sonido. El físico francés Paul Langevin, junto con el ingeniero eléctrico Constantin Chilowski, trabajaron en el año 1915 en el desarrollo de dispositivos activos de sonido para detectar submarinos. Aunque los transductores piezoeléctricos y magnetostrictivos superaron más tarde a los electrostáticos que usaron, este trabajo influyó sobre el futuro de los diseños detectores.
Al inicio de la Segunda Guerra Mundial la tecnología británica de sonar fue transferida a los Estados Unidos. La investigación relacionada con el sonar y el sonido submarino se ampliaron principalmente en este país. Se desarrollaron muchos nuevos tipos de sonar militar, entre ellos las sono-boyas, el sonar sumergible y el de detección de minas. Este trabajo formó la base de los desarrollos de posguerra destinados a contrarrestar los submarinos nucleares. El sonar siguió desarrollándose en muchos países para usos tanto militares como civiles. En los últimos años la mayoría de los desarrollos militares han estado centrados en los sistemas activos de baja frecuencia.
